USO DE REDES SOCIALES PARA PREVENIR DISTURBIOS
Las redes sociales se han convertido en el medio por el cual nos comunicamos y podemos estar informados sobre todo lo que sucede alrededor del mundo, existe un gran número de redes sociales con las que podemos interactuar según sean los intereses que se tengan (compartir con amigos, promocionar productos, crear una imagen, posicionar una marca, crear un red profesional, etc).
Para el caso especifico de Twitter, esta es un red que permite a su público estar informado sobre las diferentes tendencias y los acontecimientos del momento, por lo cual es perfecta para hacer un monitoreo de las diferentes publicaciones que realizan sus usuarios y de esta forma llegar a predecir diferentes sucesos.
Teniendo en cuenta esto, es que la Universidad de Cardiff ha presentado un estudio titulado “Can We Predict a Riot? Disruptive Event Detection Using Twitter”, en dicho artículo los autores tomaron como base los disturbios de Inglaterra en 2011 ya que les permitía obtener una gran cantidad de información concerniente a los hechos, tanto los Tweets registrados sobre este acontecimiento como también de los diferentes registros con los que contaban los entes gubernamentales.
Luego de recolectar los diferentes datos, los investigadores procedieron a utilizar distintos algoritmos de aprendizaje automático para llevar a cabo el proceso de análisis de cada uno de los Tweets recolectados, con lo cual posteriormente se podría determinar si dichas publicaciones hubieran podido ser utilizadas para predecir estos disturbios y de la misma forma si esta clase de análisis podría ser utilizado para predecir y evitar futuros incidentes.
Para el entrenamiento de los diferentes algoritmos de aprendizaje los autores determinaron cuatro variables básicas con las cuales se puede llegar a determinar el inicio de un disturbio:
- La Frecuencia de los Tweets.
- La ubicación de los Tweet.
- Las palabras utilizadas frecuentemente.
- El tiempo en el que se presentan los Tweets sobre el mismo asunto.
Por último utilizando los resultados entregados por los diferentes algoritmos planteados y contrastándolos con los registros policiales de los primeros reportes sobre este incidente, los investigadores lograron comprobar la validez de sus algoritmos, estableciendo que al utilizar esta técnica se podría llegar a determinar la aparición de un disturbio entre 28 y 60 minutos más rápido que los tiempos que registró la policía.
